Veamos hoy
como pasan los vientos,
como raudamente
pareciera que van a dar las 12
y temen quedarse solos
sin navidad,
solos sí solos;
sabes tú que es estar solo?
solo de soledad
como los niños de Haití
arrugados de hambre
y cólera,
comiendo cien años de soledad
o sabe Dios cuantos;
al menos no sabemos
a donde van los vientos,
pero si sabemos
donde van
los abortados,
los niños sin hogar,
aquellos ignorados
cuando nos reimos
comiendo un helado,
aquellas caritas sucias
para quienes no hay Dios
y menos pan;
niños sin papá noel
sin arbolito
y sin nacimiento,
a la espectativa
de que les caiga
una miga de tu pan
o simplemente
la bofetada abusiva
de tu poder;
por eso
la navidad me dá tanta
pero tanta rabia
y me quedo pensando,
en las soledades
de tu egoísmo
del mio;
en las soledades
de tantos cristos
crucificados
con nuestra
indiferencia,
pienso también
en tu soledad
aquella que escondes
mientras te ries
mientras abrazas
mientras gozas;
porque esa soledad
sí necesita un abrigo
una mano
que que la acaricie
o tal vez
un niño
que la haga sonreir
con su triste
sonrisa,
lejana y ausente
como la pena
de esta noche,
como viento
presuroso
que corre
porque no sabe
si llegará a las doce;
llegaremos
a las doce?.