Hoy como todas las tardes
de viernes santo
la recuerdo tanto
y no habrá olvido para ella
la tuve en mis labios
la tuve en mis brazos
acaricie sus pechos
y los poblé de mis besos
sobre noches infinitas
en mares apasionados
sentí las olas de sus deseos
anclé mi amor
en la orilla de su cuerpo
amé su boca
como a la miel que sueño
ame su mirada
como al firmamento
brotado de estrellas
y hoy que la pienso
la siento ausente
la perdí en las noches
de azules recuerdos
mientras estos versos
se hunden en mi alma
como las raíces
que escarban la tierra
Hoy habrá luna llena
todo estará en calma
hasta el pasto amigo
que mi amor reclama
hasta el cielo azul
de nuestra esperanza
Hoy canta el silencio
canta la nostalgia
y en coro de besos
la soledad avanza
y aunque yo la busque
y grite su nombre
la pena me dice
no serás su hombre.