Cuando escucha el alma
lo que vives y has vivido
en solitario grito
te habla en lengua viva
Y va marcando letras
y susurra en suave canto
palabras que brotan llanto
y ahogan las alegrías
Como las hojas de un árbol
parlamentan sus cuitas
y presurosas, ágiles
los círculos del agua recitan
Nubes vientos y nieve
revolotean cantando
una esperanza divina
Palabra dulce y oculta
del Verbo hondo escondido
cuando el alma nos escucha.