Retorno a la ilusión de mi infancia
a los laberintos cargados de vida
Retorno a las canciones de mis sueños
y a la risas del ¿por qué? no sé
Retorno a mi tierra prometida
vestida de verdes prados y azul pastel
A la raíz que no cambia
A las razones luces de mi niñez
Retorno a la pila de agua salada
que pusieron en mi frente sin saber por qué
Me deleito en en las chapitas de gaseosa
con las que a veces un golazo tape
Retorno a la continuidad sin fin
de fiestas infantiles y comer pastel
De sonrisas anchas llenas de miel
Estoy frente a frente de la futura mujer
Retorno a las penas de mi hogar
Ahogadas en la esperanza del mañana
Estoy tocando las horas del silencio
Y pienso que la vida no da vueltas
que el mundo es un sombrero sin cabeza
Y que la soledad es más fiel que un perro.