Me dolía tanto que mi alma
olía la indiferencia que había.
Me dolía y aun sigue doliéndome
como puñalada en los ojos,
como exterminio brutal.
Quien explica tanto desamor,
el odio abundante que marca la vida?
Nunca supe vivir en medio de lodo,
del estiércol humano, de tanta envidia.
Grite mi palabra desde que nací
y un eco lejano creció lentamente
y me hizo sentir el grujir del tiempo...
mi historia infantil.
En medio del hambre...de la soledad
rodeado de rabia me hice mas fuerte
mas pleno mas firme.
No fui comprendido y mis ideales
fueron mis amigos...la tierra..los campos
fueron mis libros, no tuve sosiego...
y al estar contigo mitad de mi vida te di.
Ahora y por siempre seré aire y tierra,
montaña que sueña y abrigo infantil.