ESTOY CANSADO DE LA LLUVIA
DE LA NEBLINA DE LA TURBIDEZ
QUE BROTA EN LA LEVEDAD DE MI SER
Y SE ESCONDE EN LA HERIDA ABIERTA
DONDE MORAN LAS PENAS DEL ALMA
COMIENZO A ODIAR EL GRIS
ME ESTORBA EL HUMO
QUIERO REGRESAR AL SOL Y ESTAR CONTIGO
QUIERO MARES DE AÑIL NO QUIERO MAS RIOS
HECHOS DE LODO Y DE MISERIA
QUE NO REFRESCAN LA TRISTEZA DE LOS NIÑOS
ESTOY CANSADO DE CARGAR LA PENUMBRA
Y LA NIEBLA DE ESTE CIELO CALLADO
CON RETAZOS DE LLUVIA Y NOCHES SIN ESTRELLAS
NO QUIERO SENTIR TEMOR DE SER LA LLAMA
NI DE ARDER Y QUEMARME EN ELLA
TODA LA VIDA SERA UNA INTERROGANTE
SIN ECO SIN SEÑAL Y SIN RESPUESTA
TODAS LAS HORAS FUERON Y SON LEJANAS
HOY POR FIN QUIERO SER UNA PRESENCIA