No digas nada, no preguntes nada.
Cuando quieras hablar quédate mudo
Que un silencio sin fin sea tu escudo
Y al mismo tiempo tu perfecta espada.
No llames si la puerta esta cerrada
No llores si el dolor es más agudo
No cantes si el camino es menos rudo
No interrogues sino con la mirada.
Y en la calma profunda y transparente
Que poco a poco y silenciosamente
Inundarás tu pecho transparente.
Sentirás el latido enamorado
Con que tu corazón recuperado
Te irá diciendo todo, todo, todo.
Cuando quieras hablar quédate mudo
Que un silencio sin fin sea tu escudo
Y al mismo tiempo tu perfecta espada.
No llames si la puerta esta cerrada
No llores si el dolor es más agudo
No cantes si el camino es menos rudo
No interrogues sino con la mirada.
Y en la calma profunda y transparente
Que poco a poco y silenciosamente
Inundarás tu pecho transparente.
Sentirás el latido enamorado
Con que tu corazón recuperado
Te irá diciendo todo, todo, todo.