Me basta un beso de tus labios
para mi boca
Me basta solamente tu mirada
para mis ojos
Me basta el color de tu pelo
para amarte
Me basta una sola ilusión
para soñarte
Me basta saber que en mi pensaste
para no morir jamás
Me basta ver el horizonte
para saberte ausente
Me basta observar las estrellas
para encontrarte
Me basta estar en un jardín
para poder olerte
Porque eres dulce miel
de uva rubia
Porque eres viento y me cantas
Porque eres el rocío de las flores
Tú que me entristece
como un viaje solo
Tú que me acoges dulcemente
como los caminos de mi infancia
como la suprema voz de mi madre
como ola núbil que poco a poco se rompe
Tú siempre tú la nostalgia
que lentamente puebla mi tiempo
con tu sabor a fruta prohibida
Me basta con ser un pájaro herrante
y seguir siendo libre para buscarte
compartir con el eco de tu voz
la eterna sensación de amarte.