Voy de la mano del viento
buscando a un amor sin fe
que se fue sin esperarme
pensando que no vendría
ahora la estoy buscando
como busca el aire al hombre
para que respire
y con las manos del viento
acaricio los silencios
y voy recorriendo tiempos
y alucinando universos
ha huido la que se fue sin espera
devorada por sus desvaríos
pero yo no tengo prisa
y seguro he de encontrarla
en un café de cenizas
ensañándose con su alma
llorando su desconsuelo
en el olvido hecho trizas.