Viernes con tus manos no me llames,
aùn crees que soy preso de ti
y cuan retoño de tu poder,
pretendes ser dueño de mis actos.
Viernes con sabor a sacrosanto,
no serè mas lisonjero de tus penas
y aunque sufras la ausencia de tus hijos,
hoy serè libre de tus encantos.
No me tientes como a Jesùs,
puès no soy santo
pero cumplo con aquello que me impongo,
soy libre de ti y prisionero de mi canto.