De luz y del color de tu mirada
aún sin verte, mis ojos están llenos.
Y entre mis manos tiembla alborozada
la caricia lejana, derramada
en las rosas abiertas de tus senos
Suéñame hoy como ayer, en la distancia.
Ven a mi sueños cada noche,
olvidando la rígida armadura
que puede estrangular tu exhuberancia
y yace junto a mí, dulce y segura.
No temas tierna criatura.
Tu fuiste creada para mi.
Sal de las sombras, entierra la costumbre
en tumba desmarcada y escondida,
para iniciar mejor la nueva vida
cerrada al flujo de la incertidumbre,
que revive el dolor de cada herida
Y en mi estarás, en caminar constante
viviendo sin la espina de la duda
en sonora canción. Oh pasión muda,
amiga, amada, enamorada, amante.
Fijate que mis sueños son constantes
y quiero abrazarte con ternura
y quiero tenerte entre mis brazos,
pequeña y sencible criatura.