Yo vivo solo
al canto de un verde prado
He pasado por tantas posibilidades
obteniendo la sonrisa de quienes me ven
y siento sus pensamientos
los deseos ocultos de decirme hola
y a la orilla de mi soledad
puse en peligro mi libertad
pues construí barrotes
en el pórtico de mis pasos
Estoy con ventanas abiertas
y por eso recibo el aire
y la indiscreta mirada del sol
o la tímida apertura de la luna
No tengo mar al frente de mis rejas
sin embargo medito en el silencio
de las doloridas sombras de la noche
A veces concluyo en que somos
todo aquello que día a día hacemos
Sufrimos por tantas cosas
por la injusticia clavada en nuestro suelo
por los amores perpetuados en el alma
como piedra en el fondo del océano
No me averguenzo de ser Abogado
día a día litigo contra el viento
y aunque el sol siempre calma los lamentos
siempre pienso en romper la ruindad
que carcome la conciencia gris oscura
e indolente de tantos jueces
Solo le pido a la poesía vida y muerte
siempre sueños e ilusiones a la gente
Yo no quiero vanidad ni mucha suerte
solo busco una misión en terca lucha
que los pobres se conviertan en la vida
y los indolentes sean muerte
Mis ventanas siguen plenas bien abiertas
abrazando a millones de sentimientos.