Llevame de nuevo en tus brazos
fíjate que estoy muy cansado
dejame en mi cuna madre mía
y arrullame con cantos de sirenas
Dame de beber tu miel de vida
esa que abunda como manantial eterno
no me abandones por más que te hayas ido
y hasme soñar con las estrellas
Se que ya no estas a mi lado
que tus santas manos quedaron en cruz
se que fue injusta tu ida
pero estas conmigo día a día
No te recuerdo madre amada
no de añoro sino te siento cada día
en mis penas en mis alegrías
estas acá escribiendo conmigo
Aún me sirve el silabario
padre nuestro y ave maría
mi voz recita junto a la tuya
el Dios te salve con el que nació tu vida
No existe tiempo ni espacio
para estar contigo cantando
aquellas canciones que tu voz cantaba
y que aún cantas todavía
Mamá de las penas infinitas
de los buenos deseos para mi
tal vez no todos los cumplí
pero logre tu ternura e hidalguía
Recogí de tu regazo madre mía
la plenitud de tu amor por los demás
el sufrimiento de ver niños sin comida
y la esperanza de un Dios justiciero
Hoy sigo contigo caminando
me das la mano para que no me suelte
me miras llorando por mi llanto
y me arropas en mi cruz de desamor.