Casi siempre caes y te enlodas
en tu propio charco
que rebosa de envidia
y en tu silencio das vueltas
como trompo
sujeto a tu abismo
a tu soledad vertiginosa
y cuando quieres volar
como un pájaro libre
caes sujeto a la profundidad
de tu existencia
Tu camino esta cerrado
como pozo donde solo
encuentras larvas de estiércol
tus ojos solo ven
montes de envidia
rencores y heridas
que aún sangran el veneno
de tu eterna muerte
No hallarás mi vida
en el pozo donde te hundes
no veras jamas lo que guardo
en la altura donde se nutre
mi existencia
donde los jazmines
y las rosas forman la mujer
que me besa y que me abraza
y que me llena de gozo
Soy un leñador que comparte
como dijo Neruda "tierra
viento y espina de los montes"
Tú vil centavo de hombre
abonaras la tierra
donde nace crece y muere
la náusea de la envidia
que te forma.
