Es hora de compartirlo todo.
Hora de cantar...de gritar con fuerza
que hay paz y libertad
y aunque este todo escondido
se vislumbra en nuestras almas la fe
que todo eso hay.
Mañana sera igual y todos los días
sera igual...mientras creamos
todo lo podemos, todo lo sabemos
y todo lo amamos.
El tiempo seguirá su ruta mezquina
pero nosotros nuestro camino de vida.
Un camino de luz de abrazo infinito.
Seguirá la tierra pariendo amor,
seguiremos todos unidos
engendrando un futuro diferente
donde el dolor sera salvación
y donde nuestros pesares
serán señales de unión,
de unción hacia algo grande...
muy grande...mas grande que el mismo mundo.
Y alcanzaremos al final el comienzo de la verdad,
de la razón verdadera.