Alejarme de lo mas preciado.
No dudes ni medites nada
porque mi deseo esta consumado.
Llévame al borde de la muerte
allí donde habita la tristeza
y la desesperación no existe.
Quiero visitar la casa,
la casa de todos
y no esta en venta.
Poblame de voces tiernas
y de manos encantadoras.
Invítame a beber
el agua viva que rodea
los jardines de marfil.
Dame la mas humilde habitación
donde pueda reclinar mi verso.
Antes de dormir
necesito un abrazo sincero
y un beso inocente.
Mañana no existirá lo que escribo
solamente estará el huerto universal
de la verdadera vida.