23 septiembre 2016

Y SABOREO TUS BESOS...

Estoy solo prendido de tus ojos.
Me alimento de tu dulsura
y saboreo tus besos como fruta fresca,
que me dejó tu boca.
Estoy solo estaciado en tu sonrisa
y en el fuego de tu cuerpo.
Nadie comprenderá jamás,
lo extenso de tu amor
ni la grandeza de tu pasión.
Estas perdida dentro de mi
y te siento y te presiento
 como el palpitar de mi vida,
como a la sangre que recorre mis venas.
No eres ajena a mis miradas,
tampoco soy ajeno
 a la intensidad de tus caricias.
Te siento como siento mi carne,
como al aire que respiro
y como a mis ilusiones.
Fuiste echa para mi,
  bajo los mismos parámetros.
Buscamos siempre cosas inimaginables
y encontramos cosas inconmensurables.
Estas conmigo y vas conmigo a todas partes.
Paseamos por horizontes lejanos
y caminamos vigorozos por campos profundos.
Tal vez sean los heraldos negros ,
que nos depara la muerte.

Mientras te beso a las dos,
otro te besa a las ocho.
Y es que la distancia y el tiempo,
son rivales desde siempre.
No sé si extinguir el tiempo
o destruir la distancia.
La verdad es que no puedo
ni extinguir ni destruir,
eso me suena a mentirte
y yo nunca te he mentido.
Seguiremos como siempre
y mientras así viviremos,
habrá paz entre nosotros.
Habrá armonía entre todos.
Mientras me duermo en la noche
pensando en los desengaños,
tú te levantas de día pensando 
en lo que pensamos.
Mientras yo estoy almorzando,
tu recién estas cenando.
Cómo es la vida caramba,
mientras, sigamos amando.