Por: Paco007.
Echemos la red
de nuestros brazos lejanos,
porque esta tarde
de torso amarillo,
presiento que la soledad llora
por nuestro llanto.
Echemos la palabra
al crepùsculo,
de eternos fuegos,
y la vendimia de la alegria
serà con nosotros.
Echemos los recuerdos
como racimos de tiempo
mientras tu sonrisa
abarca todo el litoral
de mi beso.
2 comentarios:
Bello y encantador poema propio de los grandes poetas, pienso que su sencillez hace la grandeza de ru poema, me siento sumergida en un paraiso cuando la leo. Bien por ti.Claudia.
Voy a ser un poquito dura contigo hoy, pero... Son muy pobres los dos poemas de hoy. Comparado, con lo que tú puedes dar, hoy no hay más que la mitad de un verso, y un par de palabras, que habiendo sido elegidas, no entiendo cómo ha salido "esa pobreza" que no es normal en ti.
La mitad del verso que engrandece al poema es:
"esta tarde
de torso amarillo,
presiento que la soledad llora
por nuestro llanto"
Y luego, las palabras que necesitaban más peso las has dejado en el aire sin "atar bien";
-vendimia.
-racimo.
-brazos lejanos.
UN beso Paco.
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