Cuando tus labios rozan
de la manera más leve
mis labios desenfrenados
siento dos navajas afiladas
que lentamente me matan
Tus labios son dos puñales
que me arrebatan la vida
dejando el fulminante veneno
de una adicción inhumana
Los aceros de buen temple
impregnados en tus labios
se introducen lentamente
por mi boca moribunda
y terminan en mi alma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario