23 diciembre 2012

VIVO EN TU MUNDO

Mis ojos desolados han quedado estáticos.
No encuentran luz ni penumbras, solamente están ahí,
encima de mis párpados anochecidos.
No tengo la menor idea del tiempo
y el espacio suspendido inyecta irreverente un adiós.
Soy fiel reflejo del silencio
y espontáneo devoto de la prisa que lleva tu andar.
Solamente están los recuerdos prendidos como agijones
cada vez más penetrantes que obligan a callar.
Mi mundo eras tu y está acabado.
Tú movias mi vida y celebrabas la velocidad de mis reflejos.
Cada segundo era una desdicha incrustada en mi pecho.
Estaba a la deriva de ti y me llevabas como remolino.
Aún sigo estremecido y paralizado
y no hay nada ni nadie que venga a salvarme.
Me condené a ti y a tus fatigados mandatos
y ahora me resta guardar secreto de ti.

1 comentario:

Anónimo dijo...

mU LINDA POESÍA LLEVA UNA MUSICA DE PAZ.