Mis ojos desolados han quedado estáticos.
No encuentran luz ni penumbras, solamente están ahí,
encima de mis párpados anochecidos.
No tengo la menor idea del tiempo
y el espacio suspendido inyecta irreverente un adiós.
Soy fiel reflejo del silencio
y espontáneo devoto de la prisa que lleva tu andar.
Solamente están los recuerdos prendidos como agijones
cada vez más penetrantes que obligan a callar.
Mi mundo eras tu y está acabado.
Tú movias mi vida y celebrabas la velocidad de mis reflejos.
Cada segundo era una desdicha incrustada en mi pecho.
Estaba a la deriva de ti y me llevabas como remolino.
Aún sigo estremecido y paralizado
y no hay nada ni nadie que venga a salvarme.
Me condené a ti y a tus fatigados mandatos
y ahora me resta guardar secreto de ti.
1 comentario:
mU LINDA POESÍA LLEVA UNA MUSICA DE PAZ.
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