Te confío solo a ti,
que en mi tiempo
fui terco y hostil.
Fui terco en mis convicciones
y fui hostil al expresar mis emociones.
Te confìo que a pesar de todo,
empesé tarde a amar
y cuando lo hice me entregue total.
Te confío que a lo largo de mi tiempo,
sigo igual y protesto
contra toda desigualdad,
contra la injusticia y la poca sinceridad.
Te confo que me desangro
y lloro sangre por un niño infeliz,
por un niño no nacido,
y por una mujer violentada
por una madre abandonada
y por el hombre discriminado.
Te confío que nada ni nadie,
me ha podido cambiar.
Te confío que cuando muera,
estaré muy ocupado pensando
como hacer para que no haya llanto.
Como hacer para que haya paz
y qué no hacer para que no exista la maldad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario