18 noviembre 2021

vírgenes de piedra negra



a mi boca suben tristes visajes de frio
por los andes metálicos caminan
como lombrices de versos en polvo
custodiados de un cóndor de seda

una ronda de sueños ignotos 
prendidos a mis ojos sin volver
están llenos de voces perpetuas
que evaporan mi cuerpo y se van

las horas hierben y abortan
dorados tiempos firmes y agudos
que punza la lengua y el verbo profundo

una piedra negra engendra la cara
de los soñadores que rompen silencios
y la poesía como sexo virgen 
siempre y hasta siempre atraerá  al hombre






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